.
Encuéntrame el acento una vez más,
que a veces me estoy derritiendo.
No sé el carácter con cuál calificarlo
pero a mí no me enseñaron a saludar
igual que tú no sabes despedirte.
Sabes que no pienso ni un segundo pedir perdón
si yo me digo que debo, si hay razón de hacerlo.
Como el Atleti que da una de cal y otra de arena,
la inconstancia y el deseo hechos mandamiento.
Quiero imaginarte bailando en desnudez
entre flores, pues no eres menos que ninfa.
Tienes una luz armada de martillo
que me rompe las paredes de la conciencia.
Felinos pensamientos que quisiera
se m'escaparan hacia la otra barda.
. . .
I. M. *
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2 comentarios:
Precioso. Me han gustado sobre todo los versos: "Tienes una luz armada de martillo, que me rompe las paredes de la conciencia".
Te aviso de que si quieres puedes quitar el enlace a "Diario de la dura jungla", porque hace poco quise entrar en él, y me encontré que lo habían eliminado, y como ya me habían inhabilitado la cuenta hace unos meses, como supongo que recordarás, tampoco puedo hacer nada para intentar recuperarlo.
Besos salvajes.
Válgame la verga, es cierto. No sabía que podían darse la libertad de eliminar los sitios. Qué agusto.
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