viernes, junio 20

Tiene la vida un lánguido argumento que no se acaba nunca de aprender


En un hotel verde en medio del desierto
quisiera ser Cage pa' decir “Adiós a La Negra”
con una cerveza que siempre se llena
y un cigarro o trago que parezca eterno.
Tener una grisácea historia Bukowskiana
donde cojas con todos y solo a veces conmigo,
donde no sepa si morirme de cirrosis o de desamor.

El niño del tambor lo tira emputado,
alguien deja su objeto más preciado
en un campo que nunca fue de nadie,
se van las golondrinas al Antártico,
no les cantan mariachis porque cobran.
En mis tristezas contagio hasta'l aire
por eso a veces nomás no sopla viento.

Y de mi película de vida hay cosas reales
como que siempre he vivido en el desierto
y que mi vaso está permanente lleno,
pero del todo absoluto lo más importante eres tú,
y esa es la verdad que me libra de lo subjetivo.

. . .

I. M. *
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Porque yo a donde voy
hablaré de tu amor
como un sueño dorado,
y olvidando el rencor,
no diré que tu adiós
me volvió desgraciado.

: José Alfredo Jiménez - Un mundo raro

Y si quieren saber de mi pasado
es preciso decir una mentira,
les diré que llegué de un mundo raro,
que no sé del dolor,
que triunfé en el amor,
y que nunca he llorado

1 comentario:

Salamandra azul dijo...

Te he estado leyendo, espiando y me hace sentir algo lo que escribes, y bueno qué decir de José Alfredo como música de fondo...
Saludos