Eras primavera...

Eras primavera que me curó el invierno,
pero ahora estoy en un otoño más frío aún
y de incontables días de duración.
Te fuiste pero no te has ido.

Llenas las pieles de cicatrices,
atestadas de pensamientos las mentes.
El cuerpo se olvida de respirar,
y con el frío suelo dormir más.

Soñé que me despertabas en mi cama,
pero el despertar sin ti fue lo peor.
Otro día soñé que ya no me importabas,
y luego mi enfermedad aguda de recordar.

Vuelve a ser primavera
o deja de ser cualquier cosa.
Regresa o sal de mí;
deja de hacerme sufrir.


. . .

I. M. *
Cuántas noches soñé que regresabas
y en mis brazos llorabas por tu error,
luego un ruido del Bar me despertaba,
y el que lloraba entonces era yo.

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... Mi musa de dolor